Los continuos robos que se producen en la finca Capote, de propiedad municipal, han obligado a la jefatura provincial de Tráfico a suspender los exámenes teóricos de conducción que deberían realizarse mañana por la mañana, decisión que afectará a 95 alumnos de todas las autoescuelas de la ciudad, que tendrán que esperar a la próxima convocatoria, el 2 de mayo.

El jefe provincial accidental de Tráfico, José Grande, ha explicado que se han visto "obligados" a suspender las pruebas "porque el aula de exámenes no reúne unas condiciones mínimas para acoger a los alumnos", ya que los ladrones han sustraído 18 ventanas, han roto la puerta de acceso e incluso se han apropiado de un inodoro en su última visita. En este sentido, Grande aseguró que en cuanto se reparen los desperfectos, "volveremos a examinar, en concreto el 2 de mayo, y a los alumnos les servirá la misma solicitud".

Por su parte, el concejal delegado, Blas Raimundo, admitió el problema de seguridad existente en Capote, pero recordó que el consistorio "tiene un guarda que vive en el recinto", y avanzó que la brigada de obras está ya trabajando para "instalar unas vallas protectoras y colocar una nueva puerta en el aula afectada".

El edil desveló que la llave de acceso a la finca "la tienen todos los que van a hacer actividades allí", y que en numerosas ocasiones "se dejan la puerta abierta".

No obstante, los robos y desperfectos se siguen produciendo. Hace quince días, los cacos robaron una motocicleta de prácticas valorada en 4.000 euros, y causaron daños en numerosos coches del depósito municipal de la finca.