Los vecinos de San Juan están indignados. La decisión de la Junta de Extremadura y la Concejalía de Juventud de destinar la iglesia a espacio para la creación joven ha provocado la oposición frontal del barrio por considerar que no es el uso que merece un templo románico.

El presidente de la asociación de vecinos, Bonifacio Santos, fue ayer tajante: "¿Eso qué va a ser, un circo? Estamos hablando de una iglesia antigua y no se pueden hacer salas y salas para música, teatro... corremos el riesgo de que destrocen algo". Santos defendió un uso cultural para el templo: "Que hubieran metido el legado de Sayans o los cuadros del salón de otoño. También es un buen sitio para los ensayos de la banda de música, pero que no destrocen el templo, que no toquen las paredes".

El presidente vecinal se mostró especialmente descontento con el edil de Juventud, Enrique Tornero, por no haber informado al barrio de la decisión: "Nos hemos enterado por la prensa y creemos que nos debe dar una explicación porque ni siquiera sabemos cómo va a ser. Tenemos derecho a enfadarnos y a que nos informe". Tras las fiestas, convocará una reunión vecinal para tratar el tema.