El conflicto entre el jefe de la Policía Local, la plantilla y el ayuntamiento preocupa a los vecinos de San Miguel, después de que hace sólo unas semanas consiguieran el servicio de vigilancia a la entrada y salida de los alumnos del colegio para espantar a los toxicómanos que circulan por la zona. La junta directiva de la asociación no quiso entrar a valorar el enfrentamiento pero pidió ayer que la crisis no tenga como consecuencia la supresión de la vigilancia."Que nos mantengan el servicio y se coordinen", reclamó el presidente vecinal, Jaime Collado.

El secretario, Gabriel González, fue más allá al pedir el aumento del servicio y habló incluso de "discriminación porque otros colegios tienen dos policías y nosotros sólo uno, podrían equilibrar el servicio y repartir más a los agentes".

INSISTEN EN EL IES Y LA PISCINA

Pero ésta es sólo una de las preocupaciones de la junta directiva, que volvió a exigir el inicio de las obras del instituto y la piscina acompañado por la presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, Marisa Sánchez, en señal de apoyo. Del instituto, Collado dijo que "lo estamos esperando como agua de mayo" y aunque reconoció que se han dado pasos, advirtió de que "lo que queremos es que se empiece ya, que la Junta lo adjudique y no espere a que el ayuntamiento haga su parte porque llevamos un año de retraso y tenemos niños en colegios de primaria cuando deberían estar en el centro de secundaria".

Sobre la piscina, la junta directiva reprochó al edil de Deportes, Manuel Rodríguez, su plante en la última reunión prevista porque "ya es la segunda vez que nos da esquinazo". Mientras esperan volver a reunirse con el concejal el martes y, aunque les ha remitido ya el proyecto, la asociación reclamó "no tantos papeles y que se ponga a hacer la obra ya".