La junta local de gobierno decidió ayer sancionar a la pista de verano cuyo volumen de música provocó numerosas quejas el viernes pasado con cerrar este próximo como medida disuasoria para hacer cumplir la Ley de Ocio y Convivencia en materia de ruidos, según anunció ayer la concejala de la policía local, Josefa Pérez Camisón. "El horario lo cumplen --explicó-- pero han sido tantas las quejas de vecinos y asociaciones de vecinos que recibimos el viernes por lo alto que tenían la música que hemos decidido penalizarles un día sin abrir y esperamos no tener que llegar al cierre definitivo de la pista".

La edil expresó su confianza de que controlen el volumen el resto del fin de semana y evitó indicar cuántas quejas recibió la policía local, cuyo parte se limitaba a indicar que "numerosas". "Plasencia entera --zanjó-- lo oyó".