L oficina de Area de Rehabilitación Integrada (ARI) recibe un mayor número de solicitudes en verano que en es resto del año. Es una tendencia que se ha repetido durante los 11 años que lleva en activo, y este 20010 no ha sido una excepción, ya que la crisis no ha afectado mucho a los proyectos de rehabilitación.

De hecho, el director de ARI, Roberto Rubiolo, confirmó que tiene visitas programadas para inspeccionar viviendas en septiembre, que es cuando se terminan las vacaciones de los técnicos para iniciar los trámites que llevan a la obtención de las subvenciones autonómicas y estatales para la rehabilitación de las viviendas.

"Viene mucha gente que vive fuera de la ciudad pero que tiene su vivienda aquí, y que solicita información para la rehabilitación de estas casas, que habitualmente están destinadas a tiempo de vacaciones, que normalmente están situadas en la zona de intramuros, o sino en la zona de contacto", explicó Rubiolo.

La rehabilitación incluye dos conceptos, uno es el contenido, que comprende las fachadas, las cubiertas, patios, y elementos comunes de los edificios. Y el otro alude al continente, que son las obras que afectan a las instalaciones, los suelos, los cuartos de baño, cocinas, pintura o el cambio de carpintería para el ahorro energético.

"La gente suele tener claro lo que quiere realizar, pero nosotros ofrecemos un asesoramiento técnico para obtener un mejor resultado", recalca Rubiolo.

Para la obtención de las subvenciones para la ayuda de la rehabilitación el edificio tiene que tener más de 15 años de antigüedad, que el propietario no tenga más de una vivienda o que los baremos de ingresos no superen los niveles establecidos, entre otros requisitos. No obstante, quienes no cumpla estos puntos no tendrá problemas para obtener asesoramiento técnico.