Hay aún muchas pesetas olvidadas en rincones de casa a las que no se da utilidad y que sus dueños no cambiarán ya por pereza. Pero un grupo de Cáritas ha tenido una iniciativa para darles uso y ayudar además a las familias sin recursos y a los parados de larga duración de la ciudad.

¿De qué forma? depositando las pesetas en huchas que han distribuido por distintos puntos del Rosal de Ayala, barrio en el que se ubica la parroquia de Cristo Resucitado. De la docena de personas que forman el grupo de Cáritas de la parroquia surgió la idea. "Queríamos hacer algo por ayudar a las familias y a alguien se le ocurrió que esa posibilidad no estaba explotada", explicaba ayer el párroco José Luis Hermoso.

Así, bajo el lema Vuelve a dar valor a tus pesetas , ya hay huchas en la iglesia (abierta en el horario de culto) y también en la farmacia, el estanco, en la sucursal de Caja Extremadura en el barrio y en otros establecimientos y allí permanecerán todo el mes. Las pesetas recaudadas se cambiarán después por euros y todo se destinará a través de Cáritas "a las familias de la ciudad que lo necesitan y son muchas, como hemos podido comprobar con el comedor social". Confían en la solidaridad de los placentinos.