La policía local realizó el año pasado 1.410 pruebas de alcoholemia en controles rutinarios y solo 50 personas superaron la tasa de alcohol permitida al volante. Es un buen dato y el concejal de Interior, Francisco Martín, ha destacado que "ha sido un avance impresionante, hemos mejorado muchísimo respeto a otros años", pero su objetivo es reducir todavía más la cifra: "Queremos el cero por ciento porque esa minoría que conduce con dos copas de más puede hacer mucho daño".

Aludió precisamente al último accidente ocurrido en la avenida de España, donde un conductor en estado ebrio provocó tres heridos y daños en cinco vehículos.

Por eso, insistió en que su concejalía tendrá "tolerancia cero" con los infractores y mantendrá una "política de firmeza, no vamos a vacilar" al tiempo que destacó el esfuerzo de la policía local por el importante número de controles realizados.

Los 50 conductores que dieron positivo en estos fueron detenidos por la policía y se suman a otros 31 detenidos por carecer del permiso de conducir. Estas dos circunstancias se dieron unidas en cinco casos y dos de estos conductores fueron denunciados además por un delito de conducción temeraria, mientras que otros dos se negaron a someterse a las pruebas.

La mayoría de los detenidos fueron hombres, 47 frente a tres mujeres, por lo que Martín felicitó a estas y recriminó a los primeros porque "se pasan por el arco del triunfo la prohibición de beber y conducir, las mujeres son más responsables".

En cuanto a la franja de edad, la mayoría de los que dieron positivo en alcohol fueron jóvenes de 18 a 30 años (23), mientras que las detenciones se produjeron en un 82% los fines de semana y entre la medianoche y las siete de la madrugada.

Martín también se refirió a los 31 detenidos el año pasado por conducir sin carnet: "Es que hay que recordar lo obvio y es que no se puede conducir sin licencia". También en este caso, la mayoría de los infractores fueron hombres, 28 frente a tres mujeres y destaca el hecho de que cuatro de los detenidos eran menores de edad. También en este caso la mayoría tenía entre 18 y 30 años (17). Tres tenían el permiso retirado por orden judicial, mientras que otros tres fueron detenidos hasta en tres ocasiones por conducir sin carnet.