Los alumnos del curso de flauta y tamboril de la Universidad Popular se ofrecieron ayer a la directiva de la Devoción de la Virgen de la Salud para que no se pierda la tradición del tamborilero y los pedidores que recorren los calles hasta la víspera del Ramo de la Salud y la novena, visto que este año no ha encontrado a ninguno que sustituya al anterior, ya jubilado, tal y como publicó El Periódico ayer.

Son varios los correos electrónicos que recibió ayer mismo el director de la Universidad Popular, Julio Pérez, de alumnos del curso que están dispuestos a colaborar con los devotos de la Salud para conservar la tradición. No en vano se apuntaron a la Universidad Popular con esa intención y llevan un año recibiendo clase de Santiago Béjar, todo un maestro del tamboril, a la sazón hijo del tamborilero que colaboró con el insigne García Matos en la recuperación del folclore extremeño.

Es más, la Universidad Popular oferta precisamente desde hoy hasta veinte plazas para el segundo año, con prioridad para los antiguos alumnos, que son todo un relevo generacional de este arte.