El colectivo de taxistas se desayunó ayer con la desaparición, por sorpresa, de seis de las ocho plazas con que contaba la parada situada frente al ambulatorio Luis de Toro. Lo que unido al traslado de la parada del Hospital Virgen del Puerto a un emplazamiento menos visible, también sin previo aviso, no ha hecho más que encrespar los ánimos de un sector que reclama respeto al ayuntamiento. En ambos casos ha sido como consecuencia de las obras en ejecución, pero además de pedir alternativas, insisten en que se les tenga más en consideración. "Nosotros perdemos, pero el público también", advierte un portavoz que se quejó de "la falta de respeto que supone para un colectivo que lo único que queremos es trabajar y nos lo están poniendo difícil". Hay treinta licencias y dieciséis plazas en tres paradas.