Los conductores que circulaban ayer por la ronda del Salvador fueron testigos de una nueva forma de vandalismo. Cerca de las tres de la tarde una parte de la vía, la que hay poco antes de llegar al colegio San José, apareció llena de tornillos nuevos y con una cinta de obra atada de un lado a otro de la calle, para sorpresa e indignación de todos.

Este acto vandálico obligó a cortar el tráfico de vehículos hasta que la policía local y algunos transeúntes cortaron la cinta y recogieron los tornillos. Además, alguno de los coches aparcados tenía las ruedas pinchadas.