El radar móvil que el ayuntamiento recibió el pasado mes de febrero comenzará a recorrer las calles de la ciudad previsiblemente esta semana, según indicó ayer la concejala de Tráfico, Josefa Pérez. Una sucesión de problemas han retrasado su estreno, muy esperado por los vecinos porque controlará la velocidad en vías donde habitualmente no se respetan las señales, como la avenida del Valle.

El vehículo permanece en la ciudad oculto para no dar pistas a los conductores y una vez se instale la cámara de fotos y el resto del mecanismo, saldrá a la calle para controlar la velocidad en cualquier punto de la ciudad, aunque especialmente en las zonas más problemáticas.

El radar llegó en febrero cedido en principio por tres meses por la jefatura provincial de Tráfico, sin embargo, no pudo comenzar a funcionar por falta de autorización. Posteriormente, técnicos de Tráfico acudieron a la ciudad para enseñar el manejo del radar a la policía local, que realizó pruebas con el vehículo con la intención de estrenarlo, pero la concejala explicó ayer que un nuevo inconveniente ha impedido que funcionara antes: "El coche ha tenido que pasar la ITV, por lo que tuvimos que devolverlo a Madrid y ha llegado la semana pasada".

Así, espera que esta misma semana pueda salir a la calle y una de las vías donde previsiblemente se colocará es en la avenida del Valle, cuyos vecinos llevan años esperando unos semáforos que el actual equipo de gobierno ha pedido ya en dos ocasiones.