Para no causar problemas en el tráfico, el ayuntamiento no acometerá la última fase de reordenación de la avenida de la Vera hasta que concluya la reforma que está en marcha de la vecina plazuela de Luis de Zúñiga. Así lo explicó ayer la alcaldesa Elia Blanco durante la inauguración del primer tramo con el deseo de que a mediados de verano pueda empezar a completarse la tan esperada mejora de la avenida de la Vera. Un proyecto municipal que ha tardado hasta doce años en materializarse.
De ahí el semblante sonriente de Elia María Blanco. "Estamos recogiendo --dijo-- la cosecha que sembramos la anterior legislatura". Si bien era una asignatura pendiente desde el gobierno anterior de José Luis Díaz. Por lo que la presidenta vecinal, Guadalupe Blázquez, y José Luis Ventura, de los comerciantes, no ocultaron su satisfacción. "Se está notando ya en la afluencia de público --destacó éste-- porque antes la estrechez de las aceras y, además, llenas de coches, no invitaban a pasear por aquí".
Ahora el acerado derecho ha pasado de noventa centímetros a dos metros y de 50 a 2,5 el izquierdo a costa de eliminar toda una fila de aparcamientos. Lo que el ayuntamiento quiere compensar con el párking público proyectado en el solar anexo a la estación de autobuses. Unas obras que la alcaldesa dijo que "el próximo año queremos que estén muy avanzadas
Lo que está en duda es si la última fase de la avenida de la Vera afectará también a la plazuela de Santa Elena y su conexión con la avenida de Alfonso VIII, donde la propia Blanco reconoció que existe "la imperiosa necesidad de asfaltarla, pero aquí pretendemos hacer también un tratamiento integral y no aseguro si será a la vez o después".
