La avenida Dolores Ibárruri, una de las más grandes de la ciudad, con casi un kilómetro de longitud, "tan solo tiene dos pasos de peatones y ningún mecanismo de control de velocidad", así lo indicó a primero de mes el coordinador local de Izquierda Unida, Luis Ranilla.

Del mismo modo, los vecinos de la zona consideran que son insuficientes los hábiles viales instalados en la zona para los peatones "porque hay gente que va a gran velocidad y tenemos que atravesar la vía con miedo, ya que si queremos cruzar por un paso de cebra tenemos que andar cientos de metros", reconocieron algunos residentes.

Por ello, Ranilla ya anunció que instarán al concejal de Movilidad "a que se realice un estudio para poner más pasos, puesto que pueden ocasionarse percances". Así también, el coordinador señaló que otro de los problemas de la avenida "es el exceso de velocidad, por lo que otra reclamación al edil será la instalación de algún tipo de control".

Por su parte, la presidenta vecinal de Mirador del Valle, Nuria González, confirmó ayer que "la intención de la asociación es solicitar una reunión con ediles y alcaldesa cuando pase el periodo vacacional para transmitirles las necesidades del barrio.