La terraza ubicada en la plaza Bonifacio Cano, junto a la galería Iberia, ha comenzado a sufrir la ira de los vecinos, que para demostrar su malestar por los ruidos no han tenido reparos en lanzar hasta cubos de agua sucia por los balcones.

Este caso se dio el pasado miércoles, sin embargo, no ha sido el único porque el propietario de la terraza ha denunciado ya en Comisaría otras dos agresiones a su establecimiento. Según explicó ayer, todas se han producido en los últimos quince días, aunque la que más le ha disgustado ha sido la del miércoles porque pudo afectar de lleno a los clientes de la terraza, aunque afortunadamente ninguno estaba sentado a la mesa en la que cayó el agua sucia del cubo que un vecino arrojó desde su balcón.

LA POLICIA NO OYO RUIDOS

El suceso se produjo en torno a las 00.10 horas y previamente los vecinos habían llamado a la Policía Local para quejarse por los ruidos de la terraza, aunque los agentes no apreciaron escándalo alguno y abandonaron la zona. Fue entonces cuando un vecino lanzó el cubo de agua sucia y el propietario volvió a llamar a la policía para después presentar denuncia en Comisaría.

Antes había presentado otras dos por haberse encontrado la cerradura sellada con silicona, con lo que se vio obligado a reventarla para poder entrar a su establecimiento, y en otra ocasión alguien colocó candados también en la cerradura. Ambos sucesos los achaca a los vecinos y dice estar harto de la situación porque "están atentando contra la propiedad privada, yo tengo todos los permisos en regla y he pagado la tasa para tener terraza. Este suelo no es para ellos, lo pagamos todos". No es la primera vez que los vecinos recurren a lanzar cubos de aguas para espantar a otras terrazas, que al final cerraron.