Desde el 1 de julio y hasta el 31 de agosto, son 30 los niños del barrio de San Juan los participantes en en el campamento de verano que organiza la asociación vecinal.

"Realizan manualidades, reciben clases y hacen deportes y juegos tradicionales", afirma la presidenta de la asociación de vecinos, Dolores Marín.

Entre las nueve de la mañana y hasta las tres de la tarde, las dos monitoras con las que cuentan mantienen entretenidos a los niños, de entre cuaro y doce años, "separados en dos grupos, según la edad", en la terraza del bar que sirve de sede para la asociación, y que se destina a uso exclusivo del campamento durante toda la mañana.

Allí "tienen su desayuno de fruta y aprenden a convivir entre ellos". De hecho, "cuando juegan juntos al pañuelo y al balón, los mayores se responsabilizan de los pequeños".

Otras veces, las monitoras los llevan de excursión a "la piscina municipal" y ayer lo hicieron al parque de Tráfico, que la policía local mantiene abierto en verano para los campamentos. No es la piscina municipal, "o la Isla, donde también van" su única forma de paliar las altas temperaturas, ya que los juegos incluyen "combates con pistolas de agua".

La presidenta de la asociación afirma que está en proyecto realizar en la misma terraza del bar una "acampada nocturna" un fin de semana, algo que "a los niños les encanta", y que incluirá "una ruta con liternas por La Isla".