En enero del 2014, Noel Nieto le salvó la vida a David, un niño que pudo haberse asfixiado con un caramelo de la cabalgata de Reyes si no hubiera llegado Nieto, quien le realizó la maniobra de Heimlich y así el pequeño pudo expulsar el caramelo.

Por esta labor que le convirtió en un héroe, sobre todo a los ojos de la familia del niño, el próximo mes de octubre, este voluntario de Protección Civil desde hace ya 20 años, recibirá uno de los premios nacionales que la Asociación Sonrisas ha bautizado como Héroes Sonrisas Solidarias.

Coincidirá con el Día Mundial de la Sonrisa, la misma que tiene Nieto desde que le comunicaron la noticia. «No me lo esperaba, la verdad. Estoy muy contento y muy agradecido».

El coordinador de Protección Civil de Plasencia, Ángel Carretero, le propuso a nivel nacional y considera «muy gratificante» que la asociación la haya aceptado.

Desde que se ha hecho pública, no han dejado de llegar felicitaciones, por lo que Nieto se siente «muy halagado y abrumado».

Continúa viendo a David y «cada vez que nos vemos nos saludamos. Yo toda la vida me acordaré de ese momento». No obstante, como suele ocurrir, no se considera un héroe, sino que afirma que «un voluntario está para eso» y no duda de que, a pesar del reconocimiento, que será el 6 de octubre en Madrid, lo más gratificante para él es «que el chico está ahí», vivo y sonriendo.