Hace dos años, el ayuntamiento puso en marcha, junto con la asociación Euexia, el programa de respiro familiar, dirigido a personas con diversidad funcional y que anteriormente había promovido el Sepad, según explicó ayer la edil Mayte Díaz. Ahora, tras la parada veraniega, la Concejalía de Igualdad lo retoma, con presupuesto de momento hasta diciembre y la intención de continuar el próximo año hasta la finalización del curso escolar.

Se trata de un programa muy solicitado por los padres y que para los usuarios supone «felicidad. Están con chicos como ellos y hacen un sinfín de actividades. Supone diversión y entretenimiento», explicó ayer Álvaro Cano, gerente de Euexia.

Cuentan con 20 plazas, pero hay ya inscritos 14 chicos, la mayoría ya estuvieron el año pasado y hay un inscrito nuevo. Pero todavía hay 6 plazas disponibles, por lo que la concejala y Cano han animado a los padres a apuntar a sus hijos.

Está abierto a usuarios de 4 a 21 años y lo que ofrecen son actividades los sábados y domingos de cuatro a ocho de la tarde. El punto de encuentro es la universidad popular, pero después, «los chicos van al teatro, al cine, a actividades deportivas, visitan las instalaciones de la policía, la oferta es muy variada, los niños están encantados y los padres, más». También realizan actividades con ellos, como viajes, pero de lo que se trata es de que «los padres tengan un respiro y puedan aprovechar esas horas para conciliar su vida familiar», apuntó Díaz.

El ayuntamiento aporta 1.700 euros mensuales y los padres, una sola inscripción de 30 euros. Pueden recoger la solicitud en el edificio de Servicios Sociales o en la sede de Euexia, que cuenta con tres monitores y dos voluntarios y anima a sumarse al programa como voluntario. El objetivo, lograr la inclusión y el disfrute de su tiempo libre. H