Varias losetas volvieron a caer ayer a la vía pública en la calle Obispo Varela, situada tras la plaza de San Calixto. Según explicaron los bomberos, se desprendieron desde una altura aproximada de treinta metros y fueron a caer en mitad de la calzada, aunque en ese momento ni personas ni vehículos pasaban por la calle, por lo que no hubo mayores consecuencias.
Sin embargo, los bomberos han querido advertir del peligro que supone transitar por la calle, ya que consideran que sigue existiendo riesgo de que puedan desprenderse nuevas losetas. Precisamente, varias sentencias han obligado a los constructores a reparar las fachadas de toda la zona después de que 150 vecinos les denunciaran por este y otros desperfectos en las viviendas. Sin embargo, la reforma está paralizada porque los hermanos Paredes (los constructores) han recurrido al Tribunal Supremo.
Las sentencias ratifican que el anclaje de las losetas es insuficiente y hay riesgo de que caigan a la calle y por eso, y ante la demora de la resolución judicial --ya que la demanda se presentó en el año 2002--, una comunidad de vecinos ha optado por instalar una marquesina justo en la esquina de San Calixto con Obispo Varela para proteger a los peatones. En esta marquesina golpearon ayer las losetas que cayeron después a la calzada.
Pese a todo, hay vecinos que se preguntan si "es que tiene que caerle una loseta a alguien encima y matarle para que las arreglen de una vez, es que da miedo entrar y salir de casa", dicen
