Una representación de las mejores artesanas del bolillo llegadas de diferentes localidades extremeñas y de varias comunidades autónomas se dan cita hoy en Hinojosa del Valle, en el marco del I Encuentro Nacional de Encaje de Bolillos, que contará con unas 250 artesanas de esta complicada disciplina artesanal.

El evento está organizado por el ayuntamiento en colaboración con la Asociación de Bolilleras y la Diputación de Badajoz a través del Area de Igualdad y Desarrollo Local y el Patronato de Turismo.

El alcalde de la localidad, Juan Durán, considera el evento como "un impulso" a la artesanía local pero a la vez "arraigada en muchos pueblos de Extremadura". El encaje de bolillos de Hinojosa del Valle es, según el mandatario, tanto por su "peculiaridad" como por su "exclusividad" una de las muestras tradicionales artesanas más arraigadas de la región.

Allí acudirán participantes de Casas de Reina, Calamonte, Talayuela, Puebla de la Calzada, Mérida, Cáceres, Villafranca de los Barros, Hornachos, Ribera del Fresno, Zafra e Hinojosa del Valle, además de contar con bolilleras de las provincias de León, Sevilla (Mairena de Aljarafe), Huelva y Galicia.

Según la historia de Hinojosa -localidad que apenas rebasa los 600 habitantes-, el encaje de bolillos data de la segunda mitad del siglo XIX. Fue doña Concha Sánchez Arjona la que fundó la tradición como pilar básico de la artesanía local. Las primeras labores de bolillo datan de 1920 y se fueron extendiendo por otras poblaciones cercanas durante los años 40 del pasado siglo. Estudios sobre la artesanía del bolillo señalan que el llamado popularmente "encaje brujo" se dio a conocer en la segunda mitad del siglo XIX en Sevilla. Estos encajes se extendieron después a Hinojosa del Valle donde se convirtió en una forma de vida.