La joven Zaira Escribano García, desaparecida desde el pasado sábado, ha acudido voluntariamente al cuartel de la Guardia Civil de Santa Amalia para notificar a los agentes que se encuentra sana y salva, y en perfecto estado de salud.
Horas antes, el matrimonio de la localidad pacense de Ruecas formado por Juan Escribano y Sonia García había denunciado ante el Cuerpo Nacional de Policía la desaparición de su hija mayor, Zaira, de 13 años de edad, cuyo paradero desconocen desde el pasado sábado, día 26 por la noche.
Según relató Juan Escribano, el padre de la menor, la chica desapareció en el recinto ferial de Villanueva de la Serena, lugar donde se encontraba junto a sus propios padres y un hermano pequeño disfrutando de las fiestas.
El padre señala que tras disfrutar en familia de varias atracciones feriales, ordenó a la niña que fuese a comprar unos churros diciéndole "que nos vamos a ir pronto a casa", a lo que la menor accedió aunque con gesto de contrariedad indicando que "aún era temprano".
Es a partir de ahí, en torno a las 2 de la madrugada del sábado al domingo, cuando los padres pierden la pista de Zaira, buscada por sus progenitores por tanto casi dos días.
Zaira estudia ESO en el instituto Luis Chamizo de Don Benito y llegó hace siete años a Ruecas junto a sus padres, estableciendo en esta población la familia su lugar de residencia.
La chica pertenece a una familia trabajadora, ya que su padre es empleado del servicio de recogida de basuras y su madre empleada de una central frutícola de la zona.
