L a Guardia Civil ha detenido a dos vecinos de Mérida acusados de formar parte de una banda especializada en el robo de cajeros automáticos, a la que se le atribuyen tres delitos perpetrados en entidades bancarias de Los Santos de Maimona, Guareña y Fuente de Cantos, tras los que se apoderaron de unos 8.700 euros.

Según informaron ayer fuentes de la Benemérita, la operación, denomindada Pocket Money, se inició el pasado verano después de los robos en los bancos de las poblaciones citadas. Los autores utilizaron el mismo modus operandi y se valieron de vehículos prevuiamente sustraídos Los Santos de Maimona y Villagonzalo para huir. Los ladrones ocultaban sus rostros con pasamontañas y usaban mazas y palanquetas para arrancar los cajeros automáticos de las estructuras de anclajes, para posteriormente ayudarse con carros de transporte y cargarlos en los vehículos. Estos cajeros los llevaban después a descampados de los extrarradios de Mérida para extraerles el botín, usando diferentes herramientas. Según la Guardia Civil, planificaban «minuciosamente» la ejecución de los golpes, tras elegir, estudiar y vigilar los objetivos.

Tras la comisión de los robos, no dudaban en abandonar e incluso calcinar alguno de los vehículos usados en los robos.

Con el análisis de las pruebas, información e indicios obtenidos en los escenarios de los robos, la Guardia Civil centró su investigación sobre una banda experimentada de delincuentes, asentados en Mérida, con un amplio historial en delitos contra el patrimonio. Una vez identificados dos de sus integrantes, se establecieron sobre los mismos dispositivos de vigilancia, lo que este pasado miércoles desencadenó en la detención de los mismos.

LIBERTAD CON CARGOS/ Las diligencias junto con los detenidos fueron puestos a disposicion de los Juzgados de Instrucción de Merida, quien decreto su libertad con cargos.

La operación sigue abierta y no se descarta la localizacion y detención de algún otro miembro de la banda.