La Guardia Civil detuvo en el marco de la ‘Operación Croit’ a los siete integrantes de una organización delictiva, todos vecinos de Zafra, por un presunto delito contra la salud pública. Desde marzo pasado, el Equipo de Policía Judicial y Unidades Territoriales de la Guardia Civil de Zafra, investiga la actividad de un grupo que se estaría dedicado al tráfico y menudeo de opiáceos y cocaína, principalmente.

Los agentes ubicaron en tres viviendas, una en el casco antiguo y dos junto a la plaza de toros, los puntos supuestamente utilizados para vender la droga, en los que se detectó un importante trasiego de supuestos consumidores que accedían para comprar los estupefacientes. Uno de los días de vigilancia, en apenas una hora, los agentes formularon una veintena de denuncias administrativas, con la intervención de la droga adquirida. Lo que revela «la importante actividad delincuencial», según la comandancia. Una de las viviendas era utilizada por la organización como narcopiso, donde se consumía la droga adquirída; los otros son considerados como puntos de venta.

El pasado viernes, con las pruebas incriminatorias y ubicación de los puntos de venta, unos 50 agentes de distintas unidades de las comandancias de Badajoz y Cáceres, auxiliados de los perros de búsqueda y coordinados por el Juzgado de Instrucción 1 de Zafra, efectuaron simultáneamente tres registros. Los agentes hallaron sistemas de seguridad con triples puertas reforzadas con puntales y cerrojos, con los que pretendían dificultar la entrada de la Guardia Civil. Se detuvo al supuesto cabecilla y a otros seis integrantes del grupo.

Los agentes intervinieron hachís, cocaína y heroína preparada para su venta, sustancias de corte y mezcla, básculas de precisión, envoltorios y bolsas, teléfonos, dinero presuntamente obtenido de la venta de la droga y dos turismos. Los detenidos y pasaron a disposición del juez y eludieron la orden de prisión con el pago de fianzas.