Los feriantes ecuatorianos cuyos puestos ambulantes ardieron el sábado en un incendio en la localidad de San Vicente de Alcántara aseguraron ayer que el suceso fue intencionado y un acto de xenofobia, algo que no manifestaron el mismo día del incidente.

En declaraciones a Europa Press Televisión, Francisco Guamán, uno de los afectados, señaló que un grupo de ocho o diez personas les insultaron diez minutos antes del fuego. "Decían: Estos son los chiringuitos de unos moros, bajémoslos, y daban patadas", recordó.

Por su parte, el alcalde Andrés Hernáiz destacó que los primeros indicios apuntan a que el incendio fue "intencionado", pero descartó que se trate de un "ataque xenófobo", y sí de "un acto vandálico".