Un total de 313 matanzas de cerdos se han registrado desde que a mediados del pasado mes de noviembre se comenzasen a sacrificar animales en los domicilios locales. Para ello, se han tramitado 150 solicitudes al ayuntamiento, según datos ofrecidos por la Delegación de Sanidad.

De estas matanzas, un 85 % son analizadas por el equipo de veterinarios del Servicio de Salud Pública de la Junta de Extremadura, el resto lo atienden veterinarios de carácter privado por deseo del usuario.

Con respecto a otras campañas, ha aumentado el número de sacrificios, ya que como reconoció Alejandro Serrano, veterinario de la Junta, "se están declarando todas las matanzas, mientras que el año pasado había algunas que eran clandestinas".

En cuanto a los decomisos que están revelando los servicio veterinarios oficiales, no se están dando sorpresas. En este sentido, Serrano apuntó que "lo más habitual es encontrar parasitosis o didatidosis, pero sin importancia".

VIGENCIA DE LA CAMPAÑA

Aunque oficialmente el plazo para poder realizar una matanza doméstica finaliza en marzo, desde los servicio veterinarios se cree que será a finales de enero cuando la avalancha de sacrificios concluya. Así, y si las expectativas se cumplen, la cifra de matanzas alcanzará la cifra de las 430, por lo que se igualará la cifra de otras ediciones, según afirmó Alejandro Serrano.