Durante el pasado puente de la Constitución y la Inmaculada se han vuelto a producir diversos robos afectando en esta ocasión a naves, empresas y a casas particulares.
El primero tuvo lugar la semana pasada y se da la circunstancia de que el efectado, un joven que reside en El Espolón, ha sido víctima de dos en la misma semana. Primero le sustrajeron el radiocasete de su coche que estaba estacionado en dicha zona y pocos días después, en concreto el pasado jueves, entraron en su casa y se llevaron aparatos eléctricos, desde el televisor, hasta el ordenador pasando por el dvd.
Al día siguiente, los hurtos se produjeron en el mercadillo de los viernes, donde robando el bolso a varias señoras. Incluso algunas estuvieron buscando en los contenedores de la zona para ver si "habían cogido el dinero de las carteras y las habían tirado después", ya que en ellas llevaban toda la documentación.
La madrugada del domingo al lunes, el robo se produjo en una tienda de la avenida Presidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra, Deco Jardín, de donde se llevaron material de jardinería. Su propietario explicó ayer que los presuntos ladrones estuvieron durante bastante tiempo en el local pudiendo pasear por ella "como si nada", removiendo todo y destrozando parte del mobiliario, hasta se "comieron algunos bombones que teníamos", señaló. Para acceder, rompieron una chapa de la parte trasera.
ROBOS EN NAVES Por último, los últimos robos tuvieron lugar en naves de la calle Moraleja, o zona conocida como los terrenos del Farrón . En algunos casos, rompieron las verjas de las ventanas para entrar o los cristales de las mismas y en otros se saltaron por los patios de una a otra. Una vez dentro, revolvieron todo y se llevaron aperos, herramientas, dvd, videoconsolas y otros materiales. Además, de una se llevaron un quad, que abandonaron a pocos kilómetros, ya que tenía poca gasolina y se les agotó.
Los afectados se mostraron ayer molestos con esta situación, sobre todo por los daños que provocan y los problemas que causan. Pero también se quejaron porque han tenido que esperar varios días para que acuda la policía científica a sus respectivas propiedades. En el caso del piso, el padre de su dueña aseguró que fueron varios días después, y en el caso de la tienda de utensilios para jardín acudieron el martes. "Tuvimos que estar más de un día sin poder tocar nada y muchos menos ordenar para abrir el martes", dijo su propietario. En las naves del Farrón también tardaron varios días en acudir para realizar las oportunas investigaciones.
