Los sindicatos CC.OO., UGT y CSI-CSIF convocaron en la mañana de ayer una concentración a las puertas de la residencia asistida de mayores Felipe Trigo de Villanueva de la Serena que congregó a casi cien trabajadores, en señal de protesta por las carencias de recursos humanos que, a su juicio, sufre este geriátrico dependiente de la consejería de Bienestar Social de la Junta de Extremadura. Según las centrales sindicales, esta circunstancia repercute "en la calidad asistencial que se ofrece, que cada vez es menos digna".

En la actualidad, hay en el centro 244 residentes y unos 150 trabajadores, incluidos los administrativos. Sin embargo, los sindicatos coinciden en que la plantilla necesita ampliarse en todas las categorías laborales en unas 50 personas más.

En este sentido, uno de los auxiliares de enfermería del centro y de CC.OO., José Javier Labián, indica que cada auxiliar "tiene una media de 12 minutos para levantar y atender a cada residente, mientras que los camareros tienen que montar en 10 minutos 120 cubiertos".

UNO POR CADA DIEZ

Asimismo, Labián recuerda que mientras que la Junta de Extremadura establece que debe haber un auxiliar por cada siete residentes, en el centro de Villanueva la ratio "es de uno por cada diez en el mejor de los casos". Una situación que, según éste, se agrava en el turno de noche, cuando hay dos auxiliares de enfermería por cada ochenta residentes.

Como dato significativo, destaca que en diciembre se produjo un débito de 300 días de descanso no disfrutados por parte de los trabajadores, que ha tenido que solucionarse con la contratación de personal eventual.

Los trabajadores y sindicatos ya han trasladado estas quejas y deficiencias a la Junta de Extremadura. En este sentido, como apunta la sindicalista Juani Valle, técnicos de Bienestar Social visitaron la residencia en diciembre y se comprometieron a subsanar ciertas deficiencias, pero "aún no hemos recibido respuesta real".