La doctora Teresa Megía ha asegurado que cada vez hay más mujeres que solicitan la vacuna contra el cáncer de cuello de útero en el Centro de Orientación y Planificación Familiar del centro de salud de Villafranca de Los Barros. "El rango de edad que está solicitando esta vacuna preventiva ha superado ya los treinta años, en un proceso gradual que se inició hace unos meses", dijo.

CONCIENCIACION A juicio de Megía, este incremento en el número de solicitudes está relacionado con la "concienciación general" respecto a las consecuencias del cáncer uterino. Como señaló, "cada vez son más las madres con chicas preadolescentes que piden información e incluso la vacuna, para sus hijas y para ellas".

No obstante, serán las preadolescentes, que aún no hayan tenido su primera relación sexual, las primeras a las que se la pondán, según se contempla en el calendario que establecerá el Servicio Extremeño de Salud (SES) para la vacunación controlada. El resto de mujeres, en cambio, podrán solicitarla en los centros de planificación familiar tras una revisión ginecológica.

Al respecto, Megía subrayó que el cáncer de útero es una enfermedad "que puede afectar a cualquier mujer, pero en especial a quienes comenzaron sus relaciones sexuales a corta edad, quienes tienen muchas parejas o quienes tienen una pareja que a su vez tuvo muchas parejas, a quienes no usan el preservativo, el tabaquismo, la inmunidad de cada persona o el uso indiscriminado de anticonceptivos".

La doctora recomienda revisiones anuales y hacerse citologías rutinarias, que son la vía de detección más ágil para esta enfermedad. "A menos que ya esté desarrollada y ofrezca síntomas, la mejor forma de coger a tiempo la enfermedad es con la revisión periódica, además de con el sexo seguro", aseguró.