El empresario Agustín Tarazona ha estado implicado en los últimos tiempos en algunos escándalos.

El más importante fue, sin duda, la suspensión del concierto de Joaquín Sabina hace unos meses. Más de 5.500 personas tenían entradas y habían pagado en torno a 125.000 euros que el promotor nunca devolvió. Semanas después también suspendió el concierto de José Mercé y tampoco devolvió el dinero de las entradas.

Finalmente el 19 de julio fue detenido por la Policía Nacional acusado de estafa y denuncia falsa.