Petra Grande Pacheco cumplirá 102 años el próximo martes. Esta anciana se ha convertido en la mujer de mayor edad tanto de su pueblo natal, Mirabel, como de su lugar de residencia, Valdencín, pedanía de Torrejoncillo. Su longevidad no le ha impedido del todo llevar a cabo las aficiones que a lo largo de su vida ha practicado: el ganchillo y recitar poesías son sus grandes distracciones.

"Me gusta mucho hacer labor, pero ya tengo que ponerme gafas", explica. Cuando se le pregunta sobre los años que cumplirá el martes, duda y le resulta difícil acordarse. "Ya he perdido la cuenta de mis años", confiesa sonriendo.

Una mente clara

Pero este lapsus queda a un lado cuando comienza a recitar una poesía durante más de tres minutos a toda aquella persona que va a visitarla. Su hija Inés asegura que su madre está muy bien e incluso "se viste ella sola y apenas necesita ayuda". A pesar de su magnífica salud, "voy perdiendo mucho", comenta la anciana. Su amabilidad y su gran agilidad para levantarse y salir a la calle le permitió acudir el año pasado a un homenaje que su pueblo natal, Mirabel, le dio y que contó con la presencia del alcalde y de numerosos vecinos. Petra Grande tuvo el ánimo de acudir a este acto y traerse entrañables recuerdos y el cariño de muchos vecinos.

Esta anciana soplará el 22 de febrero las simbólicas 102 velas en la tarta de cumpleaños que compartirá en su casa junto a sus dos hijos, siete nietos, 14 biznietos y una tataranieta.