Alrededor de 150 vecinos de Valrío se manifestaron ayer desde las 10.30 hasta las 12 horas del mediodía para reivindicar el arreglo de la carretera que une la pedanía de Guijo de Galisteo con la comarcal CC-13.7. Dicha vía, cuyo mantenimiento es competencia de la Confederación Hidrográfica del Tajo, sirve de acceso a las principales carreteras EX-109 y EX-370. Los vecinos, al igual que hicieron el 28 de marzo en el cruce que está entre Valrío y Morcillo, volvieron a impedir el paso a los vehículos con cortes de 10 minutos, en la EX-108 junto a El Batán. La manifestación, que fue convocada por la asociación de pensionistas, las amas de casa, el club de fútbol, la Ampa y los cazadores, estuvo controlada por la Guardia Civil de Montehermoso y una patrulla de Tráfico.

MALESTAR Raúl Martín, vecino de Valrío, expresó su malestar y dijo que cada día tiene que soportar los baches para ir a trabajar. "Es una verguenza que en el siglo XXI tengamos estos baches, el otro día rompí una rueda de mi turismo y a ver a quién le pido daños y perjuicios" y añadió que muchas carreteras de Extremadura tienen deficiencias. "Soy camionero, viajo mucho por toda España y no te encuentras carreteras como estas, aquí tenemos caminos de cabras", afirmó.

Por otro lado, el alcalde, Leopoldo Sánchez, aseguró que no se parará hasta tener una solución. "La gente de Valrío es muy tenaz y no creo que estén dispuestos a parar hasta que se les de una solución firme", manifestó. Sánchez anunció que la próxima protesta podría tener lugar la semana que viene ante las sedes de la CHT de Plasencia o Madrid, o bien ante la Subdelegación del Gobierno en Cáceres. "Hasta ahora no hemos tenido respuesta ni de diputación, ni de la Junta, ni de CHT", añadió. Por otro lado, fuentes de la CHT manifestaron a este diario que está previsto arreglarse el acceso a la pedanía, aunque no se concretó la cuantía, ni la fecha.