Alrededor de 300 jinetes encamisaos de Torrejoncillo saldrán la noche del próximo sábado por las calles del municipio para homenajear a la Virgen de la Inmaculada, en cuyo honor se dispararán más de 20.000 cartuchos, en una fiesta que con el tiempo ha logrado ser reconocida de Interés Turístico Nacional y Regional.

La Encamisá fue presentada ayer por el alcalde y diputado provincial, José María Arias, quien indicó que espera que este año se viva con igual devoción que otros "y con el saber estar de los vecinos de Torrejoncillo".

La fiesta, de la que no se conocen sus orígenes, aunque se cree que puede estar en la Batalla de Pavia, en la que varios soldados se encomendaron una noche a la virgen para pasar a salvo por las líneas enemigas, para lo que se cubrieron con unas sábanas blancas "no se sabe si para confundirse con la nieve o para diferenciarse de los enemigos", explicó Arias, informa Efe.

Dado que se cree que la fiesta tiene este origen, en ella el papel protagonista lo tienen los hombres del pueblo, que son los encamisaos , aunque "también puede ir una mujer a caballo si no se le reconoce como mujer".

Los jinetes salen ataviados con una sabana blanca adornada, muchas de ellas con la imagen del la Virgen de la Inmaculada, más conocida en el pueblo como La Pura y van alumbrados con unos farolillos, de los que se repartirán más de 300. El mayordomo de las fiestas es el encargado de portar el estandarte, cuya salida y entrada de la iglesia son los momentos de más emoción.

Durante esta conmemoración se repartirán 500 kilogramos de coquillos y 200 kilogramos de cañas, aproximadamente. Nueve días antes de la fiesta grande empieza el novenario, con el que se abarrota, según dijeron, la iglesia de san Andrés.