Una condena de 14 años de prisión. Esa es la pena que el fiscal solicita se imponga al presunto autor de la muerte de un vecino de Coria de 63 años y padre de ocho hijos. El acusado de este crimen, Juan G. C. G., a quien el Ministerio Fiscal imputa un delito de homicidio y que se encuentra en prisión provisional por esta causa desde el 8 de mayo del 2008, será juzgado por Tribunal del Jurado el próximo mes de marzo en la Audiencia Provincial de Cáceres.

Serán pues nueve ciudados los que habrán de decidir si Juan G. C. es o no culpable de causar la noche del 7 de mayo del 2008 la muerte de J. A. R. P. en su propio domicilio, sito en el número 5 de la calle Luna. Para el fiscal sí lo es, y por ello le acusa de un delito de homicidio por el que pide la pena de prisión antes indicada, así como el pago de una indemnización de 310.000 euros a sus familiares.

En el escrito de calificación de los hechos del Ministerio Fiscal se recoge que sobre las 23.00 horas del día 7 de mayo del 2008 el acusado, que mantenía "una fuerte enemistad" con el fallecido, acudió al domicilio de este. Ya en él, "tras sostener una discusión" con él, Juan G. C., "con evidente animo de acabar con la vida" de J. A. R. P., "le asestó múltiples puñaladas por todo el cuerpo con una navaja de su propiedad de 10 centímetros de hoja, al tiempo que profería amenazas de muerte".

HERIDA MORTAL De las múltiples heridas que Juan G. C. causó a J. A. R., al menos una fue mortal. Así se pone de manifiesto en la calificación fiscal, que señala que "al incidir en el séptimo espacio intercostal izquierdo afectó a pulmón y corazón, provocando una pérdida de sangre que produjo un shock hemorrágico-hipovolémico que le causó la muerte".

También pone de manifiesto el fiscal las circunstancias familiares del fallecido, indicando que en el momento de los hechos contaba con 63 años de edad y tenía siete hijos de su primer matrimonio, y uno menor de edad de su actual mujer.

A todos ellos, en concepto de responsabilidad civil, solicita el fiscal que indemnice el acusado. A cada uno de los siete hijos mayores con 30.000 euros, al hijo menor con 40.000, la misma cantidad que a su esposa y madre de este, y con 20.000 euros a la madre de sus otros siete hijos, de la que estaba divorciado.