De nuevo se repitió la escena de la semana pasada. Y hasta en dos ocasiones: el alcalde suspendió el pleno en el que se tenía que aprobar el cambio de titularidad del hogar de los mayores ante la presencia de las cámaras de televisión.

La hora prevista de inicio era las once de la mañana, pero en cuanto aparecieron los medios de comunicación el alcalde Tomás Retamosa salió despavorido del salón a la voz de "queda suspendida la sesión". Increpado por los demás partidos políticos y por los asistentes se refugió en su despacho con sus concejales y redactó un decreto de alcaldía por el que aplazaba su sesión para dos horas mas tarde debido a "que la retransmisión del pleno por la televisión implicaría una alteración del orden de la sesión, conllevando una confusión y enfrentamiento entre la corporación y los vecinos de la localidad", según reza el escrito.

Así las cosas, los periodistas volvieron a personarse en el consistorio a la una de la tarde consintiendo Retamosa la presencia de los mismos excepto de la cámara de televisión que solo pretendía recoger dos minutos de los asistentes como imágenes de recurso. Al momento volvió a suspender la sesión plenaria.

En los cinco minutos que duró esta segunda tentativa de pleno la oposición exigió su dimisión. El PSOE argumentó que un ayuntamiento no puede estar dirigido por "una persona que está en entredicho" a lo que Retamosa contestó que "hasta que no se demuestre lo contrario deberéis esperar acontecimientos".

El concejal socialista Fausto Simón señaló que "le honraría que usted dimitiera cuando quedan tres meses para las elecciones". Finalmente el equipo de gobierno afirmó que Tomás Retamosa, del grupo Indepediente, tiene su respaldo hasta el final del mandato.

ANIMOS ENCRESPADOS

Tras la marcha del alcalde del salón algunos asistentes (que se encontraban con los nervios a flor de piel) llegaron a tumbar varios bancos de madera queriendo mostrar así su indignación por los hechos.

A la hora de cierre de esta edición, el ayuntamiento no había informado, ni a la oposición ni a los medios de comunicación de la fecha para una nueva convocatoria.