Al abrigo de la sierra de San Cristóbal, se encuentra esta localidad de tierras agrícolas, bañadas por el río Búrdalo y el canal de Orellana, que tiene en el higo su producto estrella, y cuyo renombre va más allá de las fronteras regionales y nacionales.

Las de Almoharín son tierras prácticamente llanas donde predomina el alcornoque, la encina, la jara, el romero y la retama y a las que el hombre ha salpicado de olivos e higueras.

La fecha de su fundación no se conoce con exactitud, aunque la versión más aceptada dice que fueron los almohades en el siglo XII, pero hay quienes apuntan que existía un asentamiento humano dos siglos antes. Además, y al igual que otros muchos pueblos de esta zona, fue conquistado por los caballeros de la Orden de Santiago que lo adscribieron a la villa de Montánchez, hasta que el rey Felipe II le concedió el título de villa a finales del siglo XVI.

Entre sus monumentos destaca la parroquia del Salvador, Monumento Histórico- Artístico, del siglo XVI, con una bella torre de tres cuerpos de épocas distintas construida en piedra viva. En el interior, su retablo mayor barroco y sus tres naves sostenidas por ocho columnas son los elementos más vistosos. Otro edificio religioso es la ermita de Nuestra señora de Sopetrán, patrona de Almoharín, que construyó el príncipe Ali-Maymón, hijo del rey moro de Toledo, cuando se convirtió al cristianismo adoptando el nombre de Petrán. Su construcción es de finales del siglo XI, aunque en su interior alberga un retablo mayor barroco del siglo XVIII y una talla policromada de la virgen del siglo XVII.

EL NEGOCIO DEL HIGO

La agricultura y la ganadería son el motor de su economía, destacando el cultivo y posterior envasado y comercialización del higo, al que se le han añadido otros elementos como el chocolate para sacar al mercado el bombón de higo. Junto a las higueras, el olivo y los herbáceos ocupan a una buena parte de la población.

Debido a la ingente producción de higos y a la diversidad de productos que de él se pueden obtener, ya existen platos elaborados con este fruto como la sopa de tomate con higos frescos, pero tampoco faltan en su cocina las tencas o el gazpacho de poleo. En los postres, también reina el higo, con el que se elaboran: higos a la crema, tarta helada de higos, higos en almíbar, pastel de higos con salsa de nueces, bizcocho de higos pasos y los bombones.

Finalmente, decir que del traje típico de Almoharín, destaca en la mujer un refajo denominado gandallo , confeccionado en los telares del pueblo y que podía ser o blanco y negro o de colores con un mandil negro bastante grande que lo cubría.