Los niños y niñas de Arroyo de la Luz volverán a vivir mañana el tradicional encuentro de las calaveras por tercer año consecutivo. El alcalde del municipio, Santos Jorna, explicó ayer que este ritual permite a los más pequeños desarrollar al máximo su imaginación y creatividad. Los participantes deben hacerse con una gran sandía y vaciarla al máximo para decorarla más tarde con huecos que imiten los ojos, boca y nariz. Seguidamente se coloca una vela en el interior de la sandía. El alcalde explicó que el ayuntamiento se encarga de premiar la sandía mejor decorada, la más original, la mejor iluminada, la más pequeña y la más grande, entre otras. Esta tradición, que el ayuntamiento ha recuperado, congrega cada año a medio centenar de niños del municipio cacereño.
