Unas doscientas personas tuvieron que esperar algo más de media hora en el interior del supermercado Hipersol de Navalmoral a que se solucionara una avería en la línea de caja, ya que no pudieron salir con la compra realizada al resultar imposible el cobro del importe.

Los hechos sucedieron pasadas las ocho de la tarde del jueves, cuando por causas que aún se desconocen se produjo un fallo en la denominada línea de caja, lo que inhabilitó a las cajeras para registrar y cobrar los productos adquiridos por los clientes. Con el fin de evitar más aglomeraciones, las puertas automáticas de la salida fueron cerradas, por lo que los vigilantes de seguridad tuvieron que abrir manualmente a aquellos clientes que desistieron y decidieron abandonar las instalaciones con las manos vacías, dejando el carro en el interior.

No obstante, a pesar de la larga espera, entre los clientes que hacían cola reinaba un buen ambiente y bromeaban sobre la situación. Si bien algunos usuarios decidieron marcharse, otros no tuvieron más remedio que esperar al haber consumido productos en el interior del supermercado antes de pasar por caja. Fue el caso de algunas madres acompañadas de sus hijos.

PRESENCIA POLICIAL

Hasta el centro se desplazaron efectivos de la Policía Local de Navalmoral de la Mata para evitar que surgiera algún incidente ante la aglomeración de clientes, aunque afortunadamente todo transcurrió con normalidad, reestableciéndose la rutina hacia las 21.00 horas.