El municipio de Malpartida de Cáceres ha finalizado el puente de la festividad de la Constitución con unos datos «muy positivos», según recoge el ayuntamiento en una nota. De hecho, en el escrito se especifica que en dicha festividad «se ha registrado prácticamente el cien por cien de la ocupación en sus alojamientos turísticos», concretamente, del 5 al 10 de diciembre. En algunos establecimientos, incluso, se ha llegado a colgar el cartel de completo desde el comienzo de la pasada semana del puente.
Desde el ayuntamiento se recalcó, además, que los datos estadísticos que ofrecen los responsables de la Oficina de Turismo de Malpartida «son igualmente destacables». Respecto a éstos, se ha llegado a registrar cerca de 70 turistas, mientras que el Centro de Interpretación del Monumento Natural Los Barruecos ha contabilizado casi 1.000 visitantes en estos días de fiesta. Asimismo, el Museo Vostell-Malpartida ha contado con 1.100 visitas. De éstas, según detalla el ayuntamiento, el 69 por ciento de las personas procedían de Andalucía, Castilla y León, Castilla la Mancha, Aragón y Valencia, y el resto de distintos municipios de la región.
En lo que concierne al sector hostelero a nivel local, «los datos son muy alentadores», según exponen desde el ayuntamiento. En concreto los hosteleros han expresado su satisfacción por la gran afluencia de público los días 7, 8 y 9 de diciembre.
Finalmente, desde el ayuntamiento se expresó el compromiso de continuar trabajando en la misma línea de actuaciones con el fin de potenciar los atractivos recursos que posee el municipio.
Entre éstos se encuentra Los Barruecos, un paraje natural declarado monumento natural por la Junta de Extremadura en febrero de 1996. Este espacio destaca por su importancia de la geología, la fauna y la flora de la zona, así como de los restos arqueológicos que atestiguan una continuada presencia humana en la región. Este reconocimiento oficial se debió en gran medida a la repercusión mediática que generó el proyecto del Museo Vostell Malpartida en 1976, promovido y ubicado en esos terrenos por el artista alemán afincado en Extremadura Wolf Vostell.
