La tensión en Moraleja ha estado muy presente en toda la legislatura, pero ésta ha alcanzado un grado mayor desde el anuncio de la moción de censura entre el PSOE y el edil David Pérez para quitar del sillón a la alcaldesa del PP. Esta tensión se vio ayer reflejada con la presencia de más agentes de la Guardia Civil que minutos antes de las doce del mediodía, hora a la que comenzó el pleno, permanecían cerca de la puerta del ayuntamiento. Una tensión que los ciudadanos palparon también al ver en sus coches enganchados en los limpiaparabrisas octavillas del PP que lanzaban la pregunta: ¿Por cuánto se ha vendido David Pérez?
