Vivimos prácticamente entre grietas". Así es como aseguran estar los propietarios de las viviendas de protección oficial, en total 48, que se construyeron en Vegaviana y cuyas llaves se entregaron a sus dueños a principios del 2009. Sin embargo y, a pesar de haber pasado más de un año desde que cada uno de los propietarios accedieron a su nueva casa, aún siguen viviendo un calvario que para muchos es interminable y que de forma paralela mantiene enfrentados al promotor de la obra Construcciones Cuadrado Vega y a la subcontrata Global Extremeña de Obras.
De hecho, mientras ambas empresas están actualmente inmersas en procesos judiciales, los dueños de las viviendas ven día tras día cómo sus casas no paran de resquebrajarse. Pero, los dueños no solo miran con estupor sus paredes y techos, sino que además tienen un sinfín de defectos que algunos ya han tenido que gastarse unos 3.000 euros de su bolsillo para arreglarlos. Baldosas hundidas, suelos con desniveles, humedades en pasillos y habitaciones, rodapiés mal rematados, puertas en mal estado, puertas que no cierran bien, ventanas mal puestas y marcos de las puertas torcidos son algunos de los fallos. Mientras los vecinos piden una solución, la empresa promotora y la subcontrata que realizó la obra se han denunciado, una por diferencias en el precio de la obra, y otra por dichas deficiencias.
