La Fundación Triángulo ha condenado hoy el acto vandálico contra dos murales realizados por vecinos y activistas del movimiento de Lesbianas, Gais, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales (LGBTI) de la localidad de Pizarro (Cáceres), que amanecieron borrados con pintura blanca ayer por la mañana.
El Ayuntamiento de Pizarro y activistas LGBTI locales promoverán, junto a Fundación Triángulo, que sean restituidos, en señal de protesta y reivindicación por esta agresión contra la libre expresión de la diversidad sexual, según explican en una nota.
Los murales, que se realizaron de manera colectiva y con participación de niños del municipio junto a algunos de sus familiares, aparecieron ayer borrados, pintados de blanco, de manera claramente deliberada.
Según el activista LGTBI de Pizarro Jesús Murillo, "no se trata de una agresión leve o impulsiva, sino planificada y racional, ya que han sido pintados de blanco con un rodillo".
En un mural se representa el amor diverso en el mundo a través de una pareja de esas aves que emigran según la estación del año entre Extremadura y África, en el otro se aborda la necesidad de visibilizar la diversidad LGBTI en el entorno rural por medio de la silueta multicolor de un tractor.
Para la Fundación Triángulo, que los murales amanecieran borrados es una evidente manifestación de violencia que, como el bullying, las violaciones curativas o el asesinato LGBTIfóbico, tiene el mismo origen, que es el odio por motivo de orientación sexual y expresión/identidad de género.
Por ello la Fundación Triángulo cree que se le debe aplicar la Ley LGBTI de Extremadura y ha dado traslado del hecho a la Fiscalía de delitos de odio, al Observatorio LGBTI de Extremadura y al Comité Extremeño contra el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia.
