Verónica Donaire asegura que después de sufrir la agresión sexual y física "me he sentido muy sola y desamparada por la sociedad". Después de su "mala experiencia" con la Guardia Civil, la joven también critica la actitud de varios vecinos del pueblo y cree que "si fuera hombre seguramente me habrían prestado más atención". Aunque no todo es negativo, puesto que agradece el apoyo del Instituto de la Mujer de Cáceres y de la Oficina de Atención a Víctimas de Malos Tratos. Dice que da a conocer su caso porque "ojalá sirva para cambiar el sistema y el modo de atender a las víctimas".