THtoy es un día histórico para la Mancomunidad Tajo- Salor y para cada uno de sus 15 municipios; es un día de ilusión para cada uno de sus cerca de 30.000 habitantes, el acuerdo al que hemos llegado con la Agencia extremeña de la Vivienda para la construcción de unas 1.000 viviendas repartidas entre todos sus municipios supone un proyecto político de envergadura que es todo un ejemplo de desarrollo sostenible tanto por los objetivos que persigue como por las formas que hemos utilizado para su realización.

Hace apenas dos meses me entrevisté con el presidente de la Agencia para mostrarle una seria preocupación compartida por todos los alcaldes de mi mancomunidad. Los esfuerzos que estábamos haciendo en materia de desarrollo empresarial y empleo para mantener a nuestra población en sus pueblos no darían sus frutos si esto no venía acompañado de la construcción de viviendas asequibles para nuestros ciudadanos. Nuestros jóvenes especialmente se estaban marchando a vivir a Cáceres y el gran problema a vencer era y es el progresivo despoblamiento.

La propuesta que le trasladé al presidente de la Agencia encontró un respaldo inmediato, avalado igualmente por el Presidente de la Junta de Extremadura. No podemos hacer crecer las ciudades a costa de la población de nuestros pueblos, no debemos crear ciudades nuevas a costa de perder el futuro de nuestros jóvenes en sus pueblos.

El proyecto que acabamos de presentar supone una apuesta decidida y valiente por nuestros pueblos en el terreno económico (supondrá desarrollo), en el social (las personas más necesitadas, las más beneficiadas) y ecológico (en el medio rural, sin crear grandes macrociudades) y también por las formas, todos los municipios de la mancomunidad serán beneficiados, independientemente de su población, solo teniendo en cuenta sus necesidades reales de vivienda, desde Arroyo de la Luz con sus 6.600 habitantes hasta Villa del Rey o Piedras Albas, que no superan los 200 tendrán viviendas protegidas. Un proyecto que supera localismos mal entendidos y que se convierte en un referente de solidaridad entre municipios que comparten unas mismas ilusiones, sueños y esperanzas y que a los grandes avances por dotar a nuestros pueblos de recursos sanitarios, sociales, culturales y deportivos se le añade ahora una nueva realidad de crecimiento sostenible de la población. El trabajo y la vivienda serán las herramientas de desarrollo que harán crecer a nuestros pueblos en bienestar y calidad de vida.

Este gran proyecto demuestra que en nuestra región creemos y confiamos en el futuro del mundo rural. Nuestros jóvenes deben captar el mensaje: queremos que desarrolléis vuestro futuro personal y profesional compartiendo los valores con los que habéis crecido y con las personas que mejor os conocen, vuestros amigos, vuestros vecinos, vuestras calles, vuestros barrios, vuestro pueblo... Os necesitan y ahora tendréis las oportunidades de demostrar vuestras capacidades en el lugar que mejor conocéis.

Cientos de familias y jóvenes tendrán más posibilidades de contribuir a transformar la realidad en la que viven, ese es el principal objetivo por el que muchos estamos en política.

*Presidente de la Mancomunidad

Tajo-Salor