Los ayuntamientos de Garganta la Olla, Cuacos y Aldeanueva de la Vera, junto con la mancomunidad de municipios y comunidad de monjes jerónimos que rige los destinos del Real Monasterio de Yuste, pondrán en marcha un proyecto encaminado a reconstruir la ermita de San Salvador, que fue el primer santuario utilizado por los hermanos de la Pobre Vida, que posteriormente fundarían el cenobio verato.

El objetivo que persiguen es restablecer el culto en aquel paraje, además de rescatar la romería que se celebraba el día cinco de agosto.

Los alcaldes de las tres localidades, Casimiro Herrero, Marín Pérez, y José Antonio Gargantilla, junto con el presidente de la mancomunidad, Serapio Mendoza, y el prior, Fray Francisco de Andrés, se mostraron ilusionados con la idea, poniendo como condición indispensable que "el entorno no sea degradado lo más mínimo", exigió Herrero.