El alcalde de Malpartida de Cáceres, el socialista Antonio Jiménez, está gestionando levantar en unas de las avenidas de esta localidad una estatua en homenaje a la figura de Lázaro Cárdenas, presidente de México y político que fue decisivo al finalizar la Guerra Civil española al acoger en su país a un grupo de exiliados españoles.

Cárdenas ha sido objeto de un reciente homenaje en Madrid, con actos en la Universidad Complutense, el ayuntamiento madrileño y la Casa de América, a los que han asistido su esposa, Amalia, su hijo Cuauhtémoc y sus nietos, Lázaro y Camila.

Al borde de comenzar la contienda civil y destrucción de la Segunda República, el presidente del Gobierno, Juan Negrín, envió a México al secretario general del PSOE para saber si los exiliados españoles podrían entrar en el país mexicano. Lázaro Cárdenas contestó al mensajero de la siguiente manera: "Si ese momento llegase, puede usted decir a su Gobierno que los republicanos españoles encontrarán en México una segunda patria"

Este trato hacia los exiliados españoles es lo que ha llevado al ayuntamiento malpartideño a querer rendir tributo al que fuera presidente mejicano con una estatua en una de sus calles.