Varios huesos humanos, un ataúd de cinc, ropa y zapatos. Estos son los restos que aparecieron en una escombrera de Almoharín el pasado lunes por la tarde, según confirmaron ayer a este diario fuentes de la Guardia Civil, que señalaron que, a la espera de realizar las pruebas pertinentes, "todo apunta" a que proceden del cementerio de la localidad. No es la primera vez que se produce este año un hallazgo similar en un municipio cacereño. En febrero pasado se encontraron restos óseos humanos en un vertedero de Casar de Cáceres, probablemente también con origen en el camposanto de esta localidad.

Fue un vecino de Almoharín quien, tras encontrar los huesos, dio avisó a la Guardia Civil, que desplazó hasta allí a agentes de la Policía Judicial para examinarlos. Una vez ya recogidos, "se le practicarán todas las pruebas necesarias para ver cuál es su procedencia", indicó un portavoz de la Benemérita, quien avanzó como hipótesis más probable que hayan sido trasladados desde el cementerio. Si es así, avanzó, "se investigará quién ha sido y probablemente se le impute un delito".

FEMUR Y COLUMNA El alcalde de Almoharín, Antonio Cano, también coincidió en que los huesos --"un fémur y cachitos de columna", dijo--, han sido traídos desde el cementerio, posiblemente después de trasladar los restos de un cuerpo entre dos enterramientos, proceso que, subrayó, realiza "un albañil en presencia de los familiares".

Al hacerlo, aventuró, posiblemente "no se han apartado bien los huesos, no los han recogido bien" y estos han acabado junto con los ripios en el contenedor situado en el camposanto y que el consistorio vierte periódicamente en la escombrera. Más sorprendido se mostró con el hecho de que voluntariamente alguien fuese capaz de depositar allí un ataúd de cinc. "Hay que buscar la forma de que estas cosas no sucedan", recalcó.