La catedral de Coria ha sido objeto, estos días, de actuaciones de mejoras en lo que concierne a la iluminación del monumento. Los trabajos han consistido en la instalación de un total de treinta focos, que se han colocado tras las tareas llevadas a cabo conjuntamente entre los alumnos del programa Aprendizext, del Taller de la especialidad de Electricidad, y trabajadores de la empresa municipal Emdecoria.

En primer lugar, según informaron ayer responsables municipales, se realizó un profundo estudio sobre la iluminación existente, detectándose, ciertas deficiencias puesto que tanto los focos como luces anteriores, "estaban en su mayoría obsoletas". En concreto, según detallaron responsables de Emdecoria, "se localizaron 25 focos que no funcionaban". Una vez detectadas estas carencias, primero se llevó a cabo el arreglo de diez focos y se sustituyeron otros quince, aportando actualmente una "iluminación más potente".

En concreto, se han cambiado los focos de la cúpula, instalando otros nuevos con más potencia; y en el frontón de la catedral se ha reparado la iluminación existente y también han sido restaurados los focos junto al Palacio de los Duques de Alba y los situados en la calle Iglesia. No obstante, se está pendiente de colocar cuatro luces más que iluminen el Hotel Palacio. Sobre estas actuaciones, el alcalde, José Manuel García Ballestero, manifestó que eran tareas, "necesarias", ya que la Catedral "estaba poco iluminada y necesitaba un cambio para ser un lugar más atractivo de noche", señaló.