Efectivos de la Guardia Civil pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza, localizaron en el interior de una parcela un perro de raza mastín, con un tronco de madera atado al cuello, abriéndo al propietario un expediente por maltrato animal, además de ser imputado junto con un veterinario, por un supuesto delito de falsedad documental, según informó ayer la comandancia. El perro tenía un tronco de madera de considerables dimensiones (unos 50 centímetros de longitud), atado al cuello, que limitaba e impedía la normal movilidad del animal.

Como resultado final, la Guardia Civil procedió a levantar las correspondientes actas administrativas contra el propietario del perro por maltrato animal, así como a la imputación de este y del veterinario, por un supuesto delito de falsedad documental.