La problemática de la enfermedad de la lengua azul en el ganado de lidia marcará el I Congreso Nacional sobre Alimentación, Sanidad y Lidia del Toro Bravo que desde hoy y hasta el próximo domingo acoge la localidad cacereña de Moraleja.

Aunque el alcance real de la patología es ahora bastante limitada, los profesionales del sector vaticinan una situación crítica, e incluso límite, para algunas ganaderías de Extremadura y Andalucía. Es el caso de Francisco Jímenez, veterinario y coordinador de las jornadas, que señala el próximo 1 de abril como fecha en la que de nuevo se prohibirán los movimientos pecuarios en zonas donde haya animales portadores o con síntomas.

Jímenez, después de analizar y valorar la medida, augura "una auténtica ruina" para ganaderías, como Miura o Cebada Gago, "que tienen su gran comercialización en Francia y es posible que este país no permita la entrada de ganado español bajo ningún concepto".

Para el veterinario y ponente del congreso, Luis Alberto Centenera, el problema también radica en que "animales de una misma partida que son trasladados a una plaza de toros tengan que ser sacrificados".

Centenera, reconoce que la alarma está justificada, sino se "suaviza el tema" y opina que "podría peligrar la fiesta ya que la gran mayoría de las explotaciones de ganado bravo están en Andalucía y Extremadura, zonas afectadas por la lengua azul".

Ante este panorama, Francisco Jímenez espera que la "clase política se involucre para que se tomen medidas", a pesar de que la Unión Europea marca las pautas y directrices "que tendremos que seguir en todo momento".

Los ponentes aseguran que el congreso permitirá dar una visión real de la enfermedad. También aportarán su visión sobre la problemática los veterinarios Luis Vázquez y Antonio Aparicio en una mesa redonda prevista para el domingo.