Ayer tuvo lugar un acto en recuerdo del cauriense Ricardo González, torero que con 20 años falleció en accidente de tráfico el 22 de agosto de 1993. Vecinos, aficionados al mundo del toro y representantes de clubs taurinos asistieron al evento. El alcalde de Coria, José Antonio Mora, descubrió junto con Ricardo González, padre del torero, un monolito donde se ha grabado la imagen del torero lidiando un toro.

El monumento se ha ubicado en los jardines que están entre el puente de piedra y el paseo de La Isla, un lugar en el que el joven pasó muchas horas entrenándose para llegar a ser una gran figura del toreo, dice uno de sus amigos y maestro, Mario Alcón.

Ricardo González, padre del homenajeado, se mostró muy emocionado y dijo que su hijo "era un chico fabuloso". También comentó que es muy bonito "saber que tanta gente se acuerda de mi hijo". Este homenaje ha sido solicitado y promovido por el Círculo Taurino Cauriense.