Las localidades de Moraleja y Vegaviana acogen, por segundo año consecutivo, un programa de educación familiar y de apoyo a las familias desfavorecidas o en situación de riesgo de exclusión social.

La iniciativa, cofinanciada por la Dirección General de Infancia y Familia de la Consejería de Bienestar Social y el ayuntamiento, trabaja con familias que presentan carencias o dificultades sociales. El objetivo es que logren hábitos que les permitan desenvolverse en el autocuidado y en la educación de los hijos, según explicó ayer Silvia Román, educadora familiar. "Mejoramos el mantenimiento y la atención del hogar mediante la adquisición de hábitos saludables tanto de higiene como de disciplina", añadió.

El programa se incluye en el área de servicios sociales de base del ayuntamiento y se desarrolla de lunes a viernes de 8.00 a 15 horas. Las acciones se pusieron en marcha en octubre y se prolongarán hasta el 31 de diciembre. Hasta la fecha, se ha prestado atención a quince familias del municipio y de la entidad local menor de Vegaviana."Se trata de ayudar en la superación de conflictos entre padres e hijos y de mejorar aspectos tan necesarios como la economía familiar, alimentación, sanidad e incluso horarios de sueño", concluyó.